Innovación y Calidad, las Nuevas Herramientas del E-Learning

Hoy tenemos el placer de adelantar, a modo de primicia, una pequeñísima pizca del temario de un curso de nuevo lanzamiento que ponemos en marcha en Eadic y que trata de las herramientas del E-Learning.

Se comprueba que los estudiantes a distancia se desempeñan tan bien como los presenciales y en algunos casos incluso mejor (Childs, 1965; García Aretio, 1987).

La enseñanza a distancia se convierte en un sistema didáctico justificativo por sí mismo, no en un mero sucedáneo de la enseñanza directa (Sarramona, 1981).

Guillermo Perdomo Reyes, docente del curso, es Graduado en Ingeniería en Tecnologías de la Telecomunicación, Ingeniero Técnico de Telecomunicaciones en la Especialidad de Sistemas, Técnico Especialista en Electrónica de Comunicaciones, Experto Universitario en Robótica y Visión por Computador, posee el Certificado de Aptitud Pedagógica, Master Medio Ambiente y Energías Renovables, Master en Formador de Formadores… entre otras muchas cosas.

Se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:

1. Diversificar y ampliar las ofertas de estudios y cursos reglados así como de los no reglados (matrícula abierta).

2. Implantar un sistema educativo innovador. Es sabido que esta modalidad de enseñanza surgió en muchos países como instrumento válido para estimular la innovación educativa (Mckenzie y otros, 1979) y se está haciendo necesario, cada vez más, reexaminar todas nuestras presunciones convencionales sobre educación (Tofler, 1980).

2. Impartir la enseñanza fuera de las aulas, en casa, en el lugar de trabajo o en los centros locales adecuados. Así podría compaginarse la limitación de acceso a la enseñanza convencional con la oferta de otras alternativas.

4. Suplir, e incluso superar, la educación presencial, mediante una utilización de los medios de comunicación audiovisual e informáticos integrados dentro de una acción multimedia. Los avances tecnológicos en el campo de la comunicación y de la informática, han enriquecido los instrumentos de la tecnología educativa con la incorporación de los equipos de grabación, reproducción y transmisión del sonido y de la imagen.

Así, los alumnos, a través del estudio independiente, aprenderán al menos de forma tan eficaz como el estudiante de un centro convencional (UNESCO, 1998). Más que el método en sí, importa el buen uso que se haga del mismo. (Jamison y McAnany, 1978) consideran que, a la vista de los resultados, los alumnos aprenden eficazmente con cualquier medio, si éste es utilizado adecuadamente.

5. Mantener una comunicación bidireccional frecuente como garantía de un aprendizaje dinámico e innovador. La separación entre profesor y estudiante se suaviza mediante el uso del sistema multimedia, aprovechando la distancia como elemento positivo en el desarrollo de la independencia en el aprendizaje. Con la guía del profesor, el estudiante descubrirá, interpretará y analizará sus propios objetivos, dado que se trata de motivar al alumno, no de suplir aquello que por sí mismo puede realizar.

6. Combinar adecuadamente la centralización de la producción y dirección de la enseñanza con la descentralización a través de los centros de apoyo, asociados o regionales.

7. Favorecer la posibilidad de mejorar la calidad de la instrucción al asignar la elaboración de los materiales –impresos, audiovisuales e informáticos- a destacados especialistas en cada materia.

8. Recurrir a frecuentes evaluaciones del propio sistema para diagnosticar y analizar en qué medida se han logrado los objetivos propios de la institución.